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María Elena Botazzi en el laboratorio del Hospital Infantil de Texas en Houston (Texas)/ Foto: La Esquina

María Elena Botazzi, la microbióloga de origen hondureño que podría convertirse en Nobel de la Paz

La científica y su equipo en Houston (Texas) trabajaron más de una década en desarrollar una vacuna contra la Covid-19. “Y cuando empezó el brote, ya teníamos todo el conocimiento”.

29 abril, 2022 | Por: idea180

Su nombre es María Elena Botazzi. Es directora del Centro de Desarrollo de Vacunas del Hospital Infantil de Texas en el Baylor College of Medicine en Houston (Texas). Bottazzi ha desarrollado junto al doctor Peter Hotez una vacuna contra la Covid-19 sin patente de nombre Corbevax, la cual no tiene barreras de propiedad intelectual y se administra en India con mucho éxito.

En febrero, Botazzi recibió la candidatura oficial al Premio Nobel de la Paz por su valioso aporte a la salud en beneficio de los menos favorecidos. Hace una semana fue galardonada durante el Congreso Mundial de Vacunas celebrada en Washington D.C.

La científica nacida en Italia, pero criada desde los 9 años en Tegucigalpa (Honduras) busca por todos los medios que Corbevax se pueda producir también en ese país.

Su padre conoció a su madre en el país mediterráneo cuando formaba parte del cuerpo diplomático de Honduras en Europa. Allí nació Botazzi y su hermano.

—Y cuando mi papá terminó su cargo diplomático, entonces regresamos [a Honduras].

De su padre heredó quizás el deseo de hacer servicio público en un país con inequidad social y económicas bastante marcadas. Los privilegios de los que ella gozaba contribuyeron a formar esa vocación por la investigación científica y el altruismo.

Primero estudió Microbiología y Química Clínica en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras.

—Creo que fue allí donde realmente me entró esa curiosidad de poder trabajar en esta disciplina, que es la Microbiología, la Inmunología, la Vacunología para atraer realmente soluciones que pueden ayudar el estado de salud global.

Años más tarde, Botazzi obtiene un doctorado en la Universidad de Florida y un posdoctorado en la Universidad de Miami (Florida). El doctor Hotez, con quien trabaja en equipo, fue el que la reclutó cuando trabajaba en 2011 en la Universidad de George Washington.

Publicidad de un evento de recaudación de fondos a llevarse a cabo en mayo de 2022 en la que participarán como invitados la Dra. María Elena Botazzi y el Dr. Peter Hotez.

¿Y allí germinó la idea de las vacunas?

— Empezamos a trabajar juntos creando esta idea de un centro de desarrollo de vacunas específicamente con el objetivo de crear soluciones para enfermedades tropicales desatendidas. Con este concepto de ciencia abierta, de transferencia de tecnologías, de trabajar para los países que realmente necesitaban el apoyo para poder crear estas capacidades.

En Washington D.C., ambos lideraron un departamento de estudios e investigaciones en Microbiología, Inmunología y Medicina Tropical. Fue entonces cuando lograron trasladar todo ese equipo a Houston y crearon el Centro para el Desarrollo de Vacunas del Hospital Infantil de Texas.

— Pero también hemos creado una escuela de Medicina Tropical para poder realmente atender no solo a la comunidad local, sino también a la comunidad internacional en estos ámbitos de ciencia, tecnología, atención primaria, investigación y educación, que eso es también lo más importante.

Durante todo este tiempo, por más de 10 años, el grupo encabezado por Botazzi y Hotez se ha encargado de estudiar y analizar a través de consorcios con otros centros médicos las infecciones que producen los virus que pueden causar enfermedades respiratorias graves, las cuales pueden provocar incluso la muerte.

— Y cuando empezó el brote por la Covid-19, ya teníamos todo el conocimiento, teníamos el equipo, teníamos la creatividad de cómo hacer estas ingenierías. Y la verdad es que en tres meses ya teníamos casi una solución hecha.

La Esquina TX

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