
Vista aérea del camión abandonado cerca de San Antonio (Texas) donde las autoridades encontraron a más de 50 migrantes muertos. /Foto Jordan Vonderharr vía Getty Images
Sube a 53 el número de migrantes fallecidos en el camión abandonado en San Antonio
En la mayor tragedia de tráfico de personas en las últimas décadas, hay tres posibles responsables detenidos.
Las temperaturas bordeaban los 100 grados Fahrenheit el lunes de esta semana cuando aparecieron los primeros patrulleros policiales en los alrededores de la calle Quintana, un pasaje rural cerca de la localidad de Lackland, a media hora de distancia del centro de la ciudad de San Antonio (Texas).
Rodeado por vegetación tupida, pero reseca por el calor de la temporada, los agentes divisaron el camión de carga Volvo de color rojo con placas, logos y licencia falsificadas del Departamento de Transporte.
A un lado de la carretera 35, una de las más transitadas y ruta favorita de los contrabandistas de personas, el tráiler había sido abandonado muy cerca de las vías ferroviarias. Sus puertas traseras se encontraban semiabiertas y varios cuerpos yacían sobre el pavimento.
En el interior del camión encontraron decenas de migrantes hacinados. La gran mayoría ya había fallecido.

Los paramédicos registraron en un inicio 46 muertos. Con el pasar de las horas, se informó del fallecimiento de cinco de los 16 migrantes que habían sobrevivido y que se encuentraban en diferentes centros médicos de la zona, esparcidos para atenderlos de los serios problemas de respiración y deshidratación.
Al momento, la cifra es de 53 muertos: 40 hombres y 13 mujeres de nacionalidad mexicana, hondureña, guatemalteca, salvadoreña y un cuerpo pendiente por identificar.
LOS DETENIDOS
Hay tres presuntos responsables detenidos, entre los que se encuentra el conductor del vehículo, identificado como Homero Zamorano, de 45 años, y que según las autoridades cuenta con “amplios antecedentes judiciales”.
Zamorano, que está domiciliado en Houston, así como en la zona del Valle del Río Grande (en la frontera con México), se hizo pasar como uno de los sobrevivientes para evitar su detención.
El conductor aparentemente se encontraba bajo los efectos de metanfetaminas, según reporta el San Antonio Express.
La policía arrestó, además, a dos hombres identificados como Juan Francisco D’Luna Bilbao y Juan Claudio D’Luna Méndez.

De acuerdo con los documentos presentados ante una corte federal en San Antonio, varios agentes del Departamento de Policía de San Antonio se acercaron a la dirección que aparece en la matrícula del camión horas después del hallazgo del vehículo con los migrantes fallecidos.

Tras observar “que un Ford F-250 salía de la residencia, los agentes detuvieron e identificaron a Juan Francisco D’Luna-Bilbao”, así también como a su acompañante Juan Claudio D’Luna Méndez.
Los detenidos informaron a los agentes de la presencia de un arma de fuego en la zona de la consola central del vehículo. Allí, encontraron un Fratelli Tanfoglio modelo GT380.
Inmediatamente, ingresaron al domicilio de ambos donde hallaron varias armas: una Mossberg modelo 600AT, una Beretta modelo 8000 y otras dos pistolas de fabricación clandestina.
De acuerdo con el documento oficial, D’Luna-Bilbao y D’Luna-Méndez son ciudadanos mexicanos con visas estadounidenses (B-2) vencidas. Debido al peligro de fuga inminente por su estatus migratorio, piden al tribunal que no se les fije fianza y que se les mantenga recluidos.
Tanto D’Luna-Bilbao como D’Luna-Méndez tienen programada su próxima comparecencia judicial para el 1 de julio. Ambos enfrentan hasta 10 años de cárcel y $250,000 de multas por posesión de armas de fuego por un extranjero sin permiso para permanecer en el país.
La demanda judicial no menciona si es que los acusados tienen algún grado de culpabilidad en relación con las muertes de los migrantes.

En conferencia de prensa este miércoles, el comisionado del Instituto Nacional de Migración de México, Francisco Garduño, informó que los mexicanos detenidos no cuentan, hasta el momento, con registros de flujos migratorios.
Garduño detalló el origen y destino del vehículo que transportaba a los migrantes.
“El camión pasó los puntos de revisión migratoria que están bajo supervisión del Departamento de Aduana y Protección Fronteriza. Primero, el que está ubicado en Encinal (Texas), y posteriormente el de Cotulla (Texas), antes de ser abandonado cerca de San Antonio”, dijo.
A lo largo de la franja fronteriza entre Estados Unidos y México, hay 35 puntos de revisión, de los cuales 15 se ubican en Texas.
De acuerdo con Garduño, no existe registro alguno en México del paso del camión.
Por último, indicó que el gobierno mexicano desembolsará los gastos de los servicios funerarios de los mexicanos fallecidos y también gestionará visas humanitarias para que los familiares puedan ingresar a territorio estadounidense para repatriar los cuerpos de sus seres queridos.